Hola, nuevo Wild Wild West
Parece que nos vamos de rodeo: historia, moda, cine y música. ¡Yiiiiihaaaaaaa!
A veces, los astros se alinean y el mundo de la música, la moda y el cine convergen en una sintonía perfecta para declarar cuál será la corriente que marcará las próximas temporadas (o más de una).
Beyoncé lanza dos nuevas canciones que se alejan totalmente de su estilo más personal. 16 carriages y Texas Hold ‘Em son puro country, donde la cantante vuelve a sus orígenes tejanos y empieza a hacer apología de un estilo con nombre propio.
Sobre la pasarela también hay una llamada a este estilo. Pharrell Williams, el director creativo de Louis Vuitton (y gran amigo de la pareja Beyoncé y Jay Z), hizo una propuesta al puro estilo vaquero con todas sus referencias: desierto, botas country, sombreros vaqueros, cinturones con tachuelas, tejido vaquero en chaquetas, camisas y pantalones.
El nuevo country
Pero no me gustaría poner el foco en el retorno de este estilo. Más bien me gustaría ponerlo en la descontextualización que nos presenta, en este caso, la moda y la música. El estilo country se ha exportado y explotado durante muchos años. Pero, ¿quién es la imagen del estilo country? Un hombre robusto, blanco, americano (born & raised) de algún estado del oeste de Estados Unidos; con su gorro de vaquero, sus jeans y sus botas de 100% vacuno.
Para mí, más que una tendencia, es un cambio de paradigma. La apropiación de un estilo que tradicionalmente no te ha pertenecido se convierte en denuncia, en principio de cambio. Nos parece que la comunidad negra nunca ha sido jinete en el oeste. Pero existieron, aunque la imagen que se ha vendido al extranjero (con John Wayne) ha dejado a estos vaqueros fuera de su propia historia, vendiendo al mundo cómo los hombres de tez blanca, anglosajones y protestantes eran los únicos que cabalgaban.
¿Lo curioso? La primera referencia de esto puede que venga del cine. Tarantino creó Django Unchanted hace 11 años, y vistió de vaquero protagonista a Jamie Foxx. Hasta entonces, ningún negro había subido encima de un caballo vestido de cowboy y representando el poder del wild wild west en Hollywood.
Pero la descontextualización va más allá. Porque una de las mayores insignias del estilo vaquero es precisamente… ¡el pantalón vaquero!
¿Y sabías que el tejido denim fue originariamente usado para fabricar piezas workwear, sobre todo prendas para trabajar en el campo? Era perfecto por su resistencia, pero también un símbolo de pertenecer a la clase baja de la sociedad americana.
Entonces, como muchas otras veces, llegó el cine y cambió el significado de esta prenda. En Rebelde sin causa, James Dean aparece como ese chaval indomable que va en contra de todo y de todos enfundado en unos Levi’s 501.
La rebeldía y el estilo moderno fue directamente acuñado a los jeans, influenciando a toda esa generación de jóvenes rebeldes sin causa. De ahí esta prenda la vistió Marylin con glamur, Elvis en los escenarios y un sinfín etcétera de personalidades que han hecho que ya tenga más de un siglo de historia.
He empezado hablando de Beyoncé y acabo esta newsletter contando que los pantalones vaqueros tienen más de un siglo de historia. La sintonía perfecta (e inesperada) de la que hablaba al principio…
Y vosotrxs, ¿qué opináis?
Os leo 👀 Siempre con amor, hasta la próxima ❤️
Agradecimientos a Maurici Rolo, que me inspira y aporta esa visión extra que muchas veces hace falta.
Si te gusta la lectura reposada y los temas costumbristas sigue a
y su carta bisemanal
Sí a James Dean, sí al costumbrismo 🤣🥰